Ayer, caminando por la calle Doctor Báez, en Gascue (algunos lo llaman Gazcue, yo prefiero usar la s) me sorprendí al ver un letrero de «SE VENDE» en la residencia donde anteriormente se encontraba la Galería en Santo Domingo del artista plástico Cándido Bidó (para mí uno de los pilares de la «santísima trinidad» del arte dominicano, completada por Guillo Pérez y Silvano Lora). Sigue leyendo